UN PASO UN TANGO

miércoles, 23 de octubre de 2019

POR UNA CABEZA




PROYECTO CULTURAL DE PROMOCIÓN DE LECTURA LITERARIA
“… un tango puede escribirse con un dedo, pero con el alma, porque un tango es la intimidad que se esconde y es el grito que se levanta airado, desnudo… Un tango está en el aire como el aire, está en el vuelo curvo de los pájaros, en la esquina distante y en la pared descascarada que muestra una llaga de ladrillos…”
                  Enrique Santo Discépolo (Texto inédito)

Es el fenómeno más asombroso que se haya dado en el baile popular. Desde su mismo origen no fue percibido como lo que en realidad era: una genuina creación de la clase baja, producto del hibridaje y de las oleadas inmigratorias llegadas al puerto de Buenos Aires entre finales del siglo XIX y comienzos del XX. Su historia es una parábola singular que va de las entrañas del pueblo a los libros y a las conversaciones de los intelectuales; de humildes cafés suburbanos y academias de baile al mismísimo Teatro Colón. Una vez que fue legitimado en París, la clase alta argentina lo adoptó. Pero este controvertido baile ha sido sucesivamente reprobado, ensalzado, satirizado y analizado.
Origen híbrido, sentimiento triste que se baila, lágrima de bandoneón, noche y cabaret  el tango hace metafísica sin saberlo y sus letras son un verdadero espejo en el que mirarnos y, al mismo tiempo, un refugio donde en ocasiones hallamos consuelo y sabiduría de vida.
¿Por qué tiene tanta repercusión en la literatura? Tal vez porque hoy, a la distancia, podemos intuir la   universalidad y eternidad de su esencia.
Por eso, cada “dos por cuatro”, UN PASO UN TANGO.
         POR UNA CABEZA

«Por una cabeza» es un popular tango compuesto por Carlos Gardel (música) y Alfredo Le Pera (letra) en la ciudad de Nueva York en 1935.
   Escuchá el tango interpretado por Carlos Gardel


Por una cabeza
de un noble potrillo
que justo en la raya
afloja al llegar,
y que al regresar
parece decir:
No olvidés, hermano,
vos sabés, no hay que jugar.
Por una cabeza,
metejón de un día
de aquella coqueta
y burlona mujer,
que al jurar sonriendo
el amor que está mintiendo,
quema en una hoguera
todo mi querer.


Por una cabeza,
todas las locuras.
Su boca que besa,
borra la tristeza,
calma la amargura.
Por una cabeza,
si ella me olvida
qué importa perderme
mil veces la vida,
para qué vivir.


Cuántos desengaños,
por una cabeza.
Yo jugué mil veces,
no vuelvo a insistir.
Pero si un mirar
me hiere al pasar,
sus labios de fuego
otra vez quiero besar.
Basta de carreras,
se acabó la timba.
¡Un final reñido
ya no vuelvo a ver!
Pero si algún pingo
llega a ser fija el domingo,
yo me juego entero.
¡Qué le voy a hacer..!



 UN PASO UN TANGO  






 Por una cabeza, de película


  




La Historia detrás de “Por una cabeza”
Por una cabeza es uno de los tangos más reconocidos de Gardel, siendo escrito por Alfredo Lepera en el año 1935. Fue grabado en la ciudad de Nueva York y la versión original es una de las piezas más hermosas que dejó como legado el sensacional cantor.
Su letra hace referencia a las carreras de caballos y al fanatismo que se crea en torno a estas competencias y sus apuestas, vinculado también a las mujeres y a la vida.
La expresión “por una cabeza” es sumamente usada en la jerga hípica rioplatense, donde los caballos que terminan las carreras de modo reñido se dice que ganan por una cabeza o por más de una, siendo usada como medida de referencia.


CAFÉ LA HUMEDAD



PROYECTO CULTURAL DE PROMOCIÓN DE LECTURA LITERARIA
“… un tango puede escribirse con un dedo, pero con el alma, porque un tango es la intimidad que se esconde y es el grito que se levanta airado, desnudo… Un tango está en el aire como el aire, está en el vuelo curvo de los pájaros, en la esquina distante y en la pared descascarada que muestra una llaga de ladrillos…”
                           Enrique Santo Discépolo (Texto inédito)

Es el fenómeno más asombroso que se haya dado en el baile popular. Desde su mismo origen no fue percibido como lo que en realidad era: una genuina creación de la clase baja, producto del hibridaje y de las oleadas inmigratorias llegadas al puerto de Buenos Aires entre finales del siglo XIX y comienzos del XX. Su historia es una parábola singular que va de las entrañas del pueblo a los libros y a las conversaciones de los intelectuales; de humildes cafés suburbanos y academias de baile al mismísimo Teatro Colón. Una vez que fue legitimado en París, la clase alta argentina lo adoptó. Pero este controvertido baile ha sido sucesivamente reprobado, ensalzado, satirizado y analizado.
Origen hibrido, sentimiento triste que se baila, lágrima de bandoneón, noche y cabaret  el tango hace metafísica sin saberlo y sus letras son un verdadero espejo en el que mirarnos y, al mismo tiempo, un refugio donde en ocasiones hallamos consuelo y sabiduría de vida.
¿Por qué tiene tanta repercusión en la literatura? Tal vez porque hoy, a la distancia, podemos intuir la   universalidad y eternidad de su esencia.
Por eso, cada “dos por cuatro”, UN PASO UN TANGO.
        CAFÉ LA HUMEDAD

Compuesto por Cacho Castaña a comienzos de la década del 70, la primera versión grabada es la de Rubén Juárez, el 2l de enero de 1974, acompañado por la orquesta de Raúl Garello, para el sello Odeón.
                     Escuchá este tango interpretado por Cacho Castaña


Humedad, llovizna y frío
Mi aliento empaña el vidrio azul del viejo bar
No me pregunten si hace mucho que la espero
Un café que ya está frío y hace varios ceniceros

Aunque sé que nunca llega
Siempre que llueve voy corriendo hasta el café
Y solo cuento con la compañía de un gato
Que al cordón de mi zapato lo destroza con placer

Café La Humedad, billar y reunión
Sábado con trampas, qué linda función
Yo solamente necesito agradecerte
La enseñanza de tus noches
Que me alejan de la muerte

Café La Humedad, billar y reunión
Sábado con trampas, qué linda función
Eternamente te agradezco las poesías
Que la escuela de tus noches
Le enseñaron a mis días

Soledad, soledad de soltería
Son treinta abriles ya cansados de soñar
Por eso vuelvo hasta la esquina del boliche
A buscar la barra eterna de Gaona y Boyaca

Ya son pocos los amigos que me quedan
Vamos, muchachos, esta noche a recordar
Una por una las hazañas de otros tiempos
Y el recuerdo del boliche que llamamos La Humedad

Café La Humedad, billar y reunión
Sábado con trampas, qué linda función
Yo solamente necesito agradecerte
La enseñanza de tus noches
Que me alejan de la muerte

Café La Humedad, billar y reunión
Sábado con trampas, qué linda función
Eternamente te agradezco las poesías
Que la escuela de tus noches
Le enseñaron a mis días


 UN PASO UN TANGO.
                   
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“Café la humedad”, la historia del último gran tango argentino

El Café La Humedad estaba en una de las cuatro esquinas de la avenida Gaona y Boyacá, en el límite de Flores Norte. “Era en la ochava que está en diagonal al bar Lumiton” Un bar de hombres, de rufianes. En ese café no se advertía la presencia de mujeres. No estaban prohibidas, sino que simplemente no se animaban a entrar porque el baño "era una pocilga".
Se podía leer tímidamente Bar “El Progreso". En 1968, las ventanas parecían teñidas de azul. Más para propios que para extraños, ese enclave era simplemente el Café La Humedad, que es el mismo que Cacho describió aquel año con una balada que después se convertiría, tal vez, en el último gran tango moderno, y que Cacho registró en febrero de 1973. Contó que siempre anduvo por allí, toda la vida, y que el café fue su mejor escuela. “Todavía quedamos algunos de la barra de esa época, no sé si seguimos siendo ‘la barra’, pero nos vemos de vez en cuando", dijo en una vieja entrevista.
“Tuve la suerte de parar en ese café y conocer a médicos, chorros, asesinos y buena gente. Pero el lugar era un desastre. Escribí esa letra en un rato, una tarde en la oficina del maestro Oscar Toscano, mientras él salió un rato y yo lo esperaba. Cuando la vio, me dijo: "¡No sabés lo que escribiste!". Me di cuenta con el tiempo.”El final para el Café La Humedad llegó en los años '70. De bar a pizzería, de pizzería a vinería. Años más tarde, en Carlos Calvo al 2500 Cacho Castaña abrió su propio bar con el nombre Café la Humedad. Pero esa es otra historia.   Fuente Clarín

Más Cacho Castaña

Garganta con arena, Adriana Varela-Cacho Castaña 
Cacho de Buenos Aires, La Beriso-Cacho Castaña
La última curda, Cacho Castaña 
Que tango hay que cantar, Cacho Castaña

CAMINITO



PROYECTO CULTURAL DE PROMOCIÓN DE LECTURA LITERARIA
“… un tango puede escribirse con un dedo, pero con el alma, porque un tango es la intimidad que se esconde y es el grito que se levanta airado, desnudo… Un tango está en el aire como el aire, está en el vuelo curvo de los pájaros, en la esquina distante y en la pared descascarada que muestra una llaga de ladrillos…”
                           Enrique Santo Discépolo (Texto inédito)


Es el fenómeno más asombroso que se haya dado en el baile popular. Desde su mismo origen no fue percibido como lo que en realidad era: una genuina creación de la clase baja, producto del hibridaje y de las oleadas inmigratorias llegadas al puerto de Buenos Aires entre finales del siglo XIX y comienzos del XX. Su historia es una parábola singular que va de las entrañas del pueblo a los libros y a las conversaciones de los intelectuales; de humildes cafés suburbanos y academias de baile al mismísimo Teatro Colón. Una vez que fue legitimado en París, la clase alta argentina lo adoptó. Pero este controvertido baile ha sido sucesivamente reprobado, ensalzado, satirizado y analizado.
Origen híbrido, sentimiento triste que se baila, lágrima de bandoneón, noche y cabaret  el tango hace metafísica sin saberlo y sus letras son un verdadero espejo en el que mirarnos y, al mismo tiempo, un refugio donde en ocasiones hallamos consuelo y sabiduría de vida.
¿Por qué tiene tanta repercusión en la literatura? Tal vez porque hoy, a la distancia, podemos intuir la   universalidad y eternidad de su esencia.
Por eso, cada “dos por cuatro”, UN PASO UN TANGO.
CAMINITO

Caminito es una canción de tango compuesta en 1926 por los argentinos Juan de Dios Filiberto (música) y Gabino Coria Peñaloza (letra). Fue grabada inicialmente por Carlos Gardel pero logró el éxito con una interpretación de Ignacio Corsini.

Escuchá este Tango interpretado por Ignacio Corsini



Caminito que el tiempo ha borrado
que juntos un día nos viste pasar,
he venido por última vez,
he venido a contarte mi mal.
Caminito que entonces estabas
bordeado de trébol y juncos en flor,
una sombra ya pronto serás,
una sombra lo mismo que yo.
Desde que se fue,
triste vivo yo;
caminito amigo,
yo también me voy.
Desde que se fue
nunca más volvió.
Seguiré sus pasos,
caminito, adiós.
Caminito que todas las tardes
feliz recorría cantando mi amor,
no le digas si vuelve a pasar
que mi llanto tu suelo regó.
Caminito cubierto de cardos,
la mano del tiempo tu huella borró;
yo a tu lado quisiera caer
y que el tiempo nos mate a los dos.

Caminito interpretado por Rosana Falasca


Caminito interpretado por Julio Iglesias



UN PASO UN TANGO.

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LA HISTORIA DETRÁS DEL TANGO
"Caminito" nació en un pequeño pueblo de La Rioja denominado Olta, pintoresca localidad de Los Llanos situada a 170 kilómetros de la capital provincial, con poco más de 7000 habitantes, aunque sólo contaba con unos 500 cuando el joven poeta Gabino Coria Peñaloza se deslumbró con una señorita de buena familia.
Caminito Olta, La Rioja
Corría el año 1902. La joven se llamaba María. El poeta, Gabino Coria Peñaloza. Para que sus destinos se cruzaran la naturaleza se involucró. Gabino viajaba desde Chilecito hacia San Luis cuando una gran crecida del río lo dejó varado en Olta por varios días. Alojado por sus familiares recibe la invitación para una tertulia en casa de una distinguida familia del lugar. Allí había un piano de cola, el primero de la provincia que llegara desde Chile a lomo de mula. El poeta, sensibilizado ante el majestuoso instrumento, le pidió a la anfitriona que tocara algo. Y llamó a María, maestra, profesora de música y también integrante de una familia destacada. El encantamiento mutuo fue inevitable y desencadenó en pasión. Transcurrieron unos días y el "caminito amigo" fue testigo de aquel tórrido y furtivo amor. Cuando el río volvió a su cauce, el muchacho siguió viaje y, por cierto, prometió volver.
Caminito La Boca, Buenos Aires
Al cabo de un año regresó por ella, pero María ya no estaba. Su familia, que se oponía rotundamente a esa relación pues la niña estaba prometida para un militar de Olta, había decidido mudarla a otro lugar. Desgarrado por la pena, su alma de poeta vuelca en el mítico poema toda su desdicha, regalando a la humanidad "Caminito", en humildes e imperecederos versos. El caminito de Coria Peñaloza era un sendero rural de dos kilómetros que nacía en Olta y moría en el pueblo de Loma Blanca. Es el que transitaba Gabino para encontrarse con su amor y el que acunó su ardiente y frustrado romance.
A los 15 años, movido por la inquietud de su alma bohemia, decide dejar su hogar para instalarse en Buenos Aires, donde empezó a trabajar para diversas publicaciones. En la famosa revista Caras y Caretas publicó sus poesías. Culto y sociable, comparte en ese mundo artístico, cafetines y tangos con Carlos Gardel, Quinquela Martín, Juan de Dios Filiberto y con otros reyes de la noche. Fue Quinquela quien presentó a Gabino y Filiberto en plena calle Florida, haciendo posible el milagro poético-musical.
Una callejuela del barrio de La Boca lleva el nombre de Caminito en homenaje al tango. Peñaloza no aprobó el evento, pues el caminito que inspiró sus versos estaba lejos de allí. Aquí nace la confusión. Muchos creen que el poeta se inspiró en esa calle de La Boca.


NOSTALGIAS



PROYECTO CULTURAL DE PROMOCIÓN DE LECTURA LITERARIA

“… un tango puede escribirse con un dedo, pero con el alma, porque un tango es la intimidad que se esconde y es el grito que se levanta airado, desnudo… Un tango está en el aire como el aire, está en el vuelo curvo de los pájaros, en la esquina distante y en la pared descascarada que muestra una llaga de ladrillos…”
                         Enrique Santo Discépolo (Texto inédito)

Es el fenómeno más asombroso que se haya dado en el baile popular. Desde su mismo origen no fue percibido como lo que en realidad era: una genuina creación de la clase baja, producto del hibridaje y de las oleadas inmigratorias llegadas al puerto de Buenos Aires entre finales del siglo XIX y comienzos del XX. Su historia es una parábola singular que va de las entrañas del pueblo a los libros y a las conversaciones de los intelectuales; de humildes cafés suburbanos y academias de baile al mismísimo Teatro Colón. Una vez que fue legitimado en París, la clase alta argentina lo adoptó. Pero este controvertido baile ha sido sucesivamente reprobado, ensalzado, satirizado y analizado.
Origen híbrido, sentimiento triste que se baila, lágrima de bandoneón, noche y cabaret  el tango hace metafísica sin saberlo y sus letras son un verdadero espejo en el que mirarnos y, al mismo tiempo, un refugio donde en ocasiones hallamos consuelo y sabiduría de vida.
¿Por qué tiene tanta repercusión en la literatura? Tal vez porque hoy, a la distancia, podemos intuir la   universalidad y eternidad de su esencia.
Por eso, cada “dos por cuatro”, UN PASO UN TANGO.
 NOSTALGIAS

Tango cuya letra pertenece a Enrique Cadícamo en tanto que la música es de Juan Carlos Cobián, estrenado en 1935 por Cobián.


Escuchá este tango interpretado por Juan Carlos Cobián



Quiero emborrachar mi corazón
para apagar un loco amor
que más que amor es un sufrir...
Y aquí vengo para eso,
a borrar antiguos besos
en los besos de otras bocas...
Si su amor fue "flor de un día"
¿por qué causa es siempre mía
esa cruel preocupación?
Quiero por los dos mi copa alzar
para olvidar mi obstinación
y más la vuelvo a recordar.

Nostalgias
de escuchar su risa loca
y sentir junto a mi boca
como un fuego su respiración.
Angustia
de sentirme abandonado
y pensar que otro a su lado
pronto... pronto le hablará de amor...
¡Hermano!
Yo no quiero rebajarme,
ni pedirle, ni llorarle,
ni decirle que no puedo más vivir...
Desde mi triste soledad veré caer
las rosas muertas de mi juventud.

Gime, bandoneón, tu tango gris,
quizá a ti te hiera igual
algún amor sentimental...
Llora mi alma de fantoche
sola y triste en esta noche,
noche negra y sin estrellas...
Si las copas traen consuelo
aquí estoy con mi desvelo
para ahogarlos de una vez...
Quiero emborrachar mi corazón
para después poder brindar
"por los fracasos del amor"...

Nostalgias interpretado por Diego El Cigala



Nostalgias interpretado por Andrés Calamaro


UN PASO UN TANGO


Otro tango del dúo: "Los mareados" ( 1942 )

Música: Juan Carlos Cobián

Letra: Enrique Cadícamo

Voz: Adriana Varela


NOSTALGIAS NO



PROYECTO CULTURAL DE PROMOCIÓN DE LECTURA LITERARIA

“… un tango puede escribirse con un dedo, pero con el alma, porque un tango es la intimidad que se esconde y es el grito que se levanta airado, desnudo… Un tango está en el aire como el aire, está en el vuelo curvo de los pájaros, en la esquina distante y en la pared descascarada que muestra una llaga de ladrillos…”
                                                              Enrique Santo Discépolo (Texto inédito)


Es el fenómeno más asombroso que se haya dado en el baile popular. Desde su mismo origen no fue percibido como lo que en realidad era: una genuina creación de la clase baja, producto del hibridaje y de las oleadas inmigratorias llegadas al puerto de Buenos Aires entre finales del siglo XIX y comienzos del XX. Su historia es una parábola singular que va de las entrañas del pueblo a los libros y a las conversaciones de los intelectuales; de humildes cafés suburbanos y academias de baile al mismísimo Teatro Colón. Una vez que fue legitimado en París, la clase alta argentina lo adoptó. Pero este controvertido baile ha sido sucesivamente reprobado, ensalzado, satirizado y analizado.
Origen híbrido, sentimiento triste que se baila, lágrima de bandoneón, noche y cabaret  el tango hace metafísica sin saberlo y sus letras son un verdadero espejo en el que mirarnos y, al mismo tiempo, un refugio donde en ocasiones hallamos consuelo y sabiduría de vida.
¿Por qué tiene tanta repercusión en la literatura? Tal vez porque hoy, a la distancia, podemos intuir la   universalidad y eternidad de su esencia.
Por eso, cada “dos por cuatro”, UN PASO UN TANGO.
 NOSTALGIAS
Tango cuya letra pertenece a Enrique Cadícamo en tanto que la música es de Juan Carlos Cobián, estrenado en 1935 por Cobián.


Escuchá este Tango por Juan Carlos Cobián



Quiero emborrachar mi corazón
para apagar un loco amor
que más que amor es un sufrir...
Y aquí vengo para eso,
a borrar antiguos besos
en los besos de otras bocas...
Si su amor fue "flor de un día"
¿por qué causa es siempre mía
esa cruel preocupación?
Quiero por los dos mi copa alzar
para olvidar mi obstinación
y más la vuelvo a recordar.

Nostalgias
de escuchar su risa loca
y sentir junto a mi boca
como un fuego su respiración.
Angustia
de sentirme abandonado
y pensar que otro a su lado
pronto... pronto le hablará de amor...
¡Hermano!
Yo no quiero rebajarme,
ni pedirle, ni llorarle,
ni decirle que no puedo más vivir...
Desde mi triste soledad veré caer
las rosas muertas de mi juventud.

Gime, bandoneón, tu tango gris,
quizá a ti te hiera igual
algún amor sentimental...
Llora mi alma de fantoche
sola y triste en esta noche,
noche negra y sin estrellas...
Si las copas traen consuelo
aquí estoy con mi desvelo
para ahogarlos de una vez...
Quiero emborrachar mi corazón
para después poder brindar
"por los fracasos del amor"...

Nostalgias por Andrés Calamaro
Nostalgias por Diego El Cigala

UN PASO UN TANGO

Otro tango del dúo "Los mareados" ( 1942 ) Música: Juan Carlos Cobián Letra: Enrique Cadícamo
Voz: Adriana Varela