UN PASO UN TANGO

jueves, 8 de septiembre de 2016

No hay cerca capaz de atajar al amor



LAS DOS PLUMAS MÁS GRANDES  SE FUERON JUNTAS HACE 400 AÑOS

Shakespeare y Cervantes, creadores de cabecera de la literatura universal, el británico y el español, murieron el mismo año. Con motivo a tan importante aniversario, Proyecto LEE (LECTURA EN ESPERA) invita a realizar un recorrido virtual por dos obras cumbres de dichos autores:

·         “El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha”, de Miguel de Cervantes, es la obra más destacada de la literatura española y una de las principales de la literatura universal. El libro más traducido y editado luego de la Biblia.

·         “Romeo y Julieta”, de William Shakespeare, se ha convertido en la historia de amor por antonomasia, y puede afirmarse que su fama excede a la del mismo autor.

No hay cerca capaz de atajar al amor

“Romeo: ¡Qué bien hace escarnio del dolor ajeno quien jamás ha sentido dolores...! (Julieta frente a la ventana). ¿Pero qué luz se deja ver allí? ¿Es el sol que sale ya por los balcones de levante? Sal, hermoso sol, y mata de envidia con tus rayos a la luna, que está pálida y ojerosa porque vence tu hermosura cualquier ninfa de tu coro. Por esa razón viste de color amarillo. ¡Qué terco es quien se arree con sus galas marchitas! ¡Es mi vida, es amor el que aparece! ¿Cómo podría yo decirle que es señora de mi alma? Nada me dijo. Sin embargo ¿qué importa? Sus ojos hablarán, y yo contestaré. ¡No obstante qué atrevimiento el mío, si no me dijo nada! Los dos más bellos luminares del cielo le ruegan que los reemplace durante su ausencia. Si sus ojos relumbraran como astros en el cielo, su luz sería suficiente para ahogar los restantes como el fulgor del sol mata el de una antorcha. ¡Tal cascada de luz manaría de sus ojos, que haría despertar a las aves a medianoche, y corear su canción como si hubiese llegado el alba! Ahora coloca la mano en la mejilla. ¿Quién pudiera tocarla como el guante que la cubre?

Julieta: ¡Pobre de mí!

Romeo: ¡Habló! Siento de nuevo su voz. ¡Ángel de amores que en medio de la noche te me apareces, como emisario de los cielos a la asombrada vista de los mortales, que deslumbrados te observan cruzar con vuelo muy rápido las esferas, y mecerse en las alas de las nubes!

Julieta: ¡Romeo, Romeo! ¿Por qué eres tú Romeo? ¿Por qué no renuncias al nombre de tus padres? Y si careces de valor para tanto, ámame, y no me tendré por Capuleto.

Romeo: ¿Qué debo hacer, continúo escuchándola o hablo?

Julieta: Acaso no eres tú mi enemigo. Es el nombre de Montesco, que llevas. ¿Y qué quiere decir Montesco? No es pie ni mano ni brazo ni rostro ni fragmento de la naturaleza humana. ¿Por qué no tomas otro nombre? La rosa no dejaría de ser rosa, tampoco dejaría de esparcir su aroma, aunque se llamara de otra manera. Asimismo mi adorado Romeo, pese a que tuviera otro nombre, conservaría todas las buenas cualidades de su alma, que no las tiene por herencia. Deja tu nombre, Romeo, y a cambio de tu nombre que no es cosa esencial, toma toda mi alma.

Romeo: Si de tu palabra me adueño, llámame tu amante, e imaginaré que me he bautizado otra vez y que he perdido el nombre de Romeo.

Julieta: ¿Y quién eres tú que, en medio de la oscuridad de la noche vienes a sorprender mis secretos?

Romeo: No sé de cierto mi nombre, debido a que tú detestas ese nombre, amada mía, y si yo pudiera lo extirparía de mi pecho.

Julieta: Contadas expresiones he oído de esa boca, no obstante te reconozco. ¿No eres Romeo? ¿No eres de los Montescos?

Romeo: No seré ni una cosa ni otra, ángel mío, si cualquiera de las dos te molesta.

Julieta: ¿Cómo has llegado hasta este sitio, y cuál es tu propósito? Los muros de esta puerta son altos y no se pueden escalar; aquí podrías encontrar la muerte, siendo quien eres, si alguno de mis familiares te encontrara.

Romeo: Con las ligeras alas de Cupido he franqueado estos muros; pues no hay cerca capaz de atajar al amor: Todo lo que éste puede hacer lo osa. Tus parientes, en tal virtud, no son obstáculo para mí.

Julieta: Te matarán si te encuentran aquí.

Romeo: Diosa mía, tus ojos son más homicidas que las espadas de veinte familiares tuyos. Obsérvame sin enfado, y mi cuerpo se hará invencible.

Julieta: Daría un mundo porque no te hallaran.

Romeo: El velo lúgubre de la noche me protege de ellos. Sin embargo deseo morir a costa de sus manos, amándome tú, que eludiéndolos y salvarme de ellos, cuando me falte tu amor.

Julieta: ¿Y quién te condujo hasta aquí?

Romeo: El amor me dijo dónde vivías. Él me aconsejó; guió mis ojos que yo le había entregado. Sin ser nauchero, te juro que navegaría hasta la playa más lejana para enamorar joya tan estimada.

Julieta: Si no me cubriera el manto de la noche, el rubor de virgen invadiría mis mejillas, rememorando las palabras que en esta noche me has escuchado. Inútilmente quisiera corregirlas o desmentirlas... ¡Resistencias inútiles! ¿Me amas? Tengo la seguridad de que responderás que sí, y yo lo creeré. No obstante, podrías olvidar tu promesa, porque comentan que Jove se ríe de las deslealtades de los amantes. Si me amas en verdad, Romeo, manifiéstalo con franqueza, y si piensas que soy fácil y me rindo a la primera súplica, dímelo también, para que me ponga huraña y enfadada, y así debas suplicarme. Te quiero mucho, Montesco, mucho, y no creas que soy ordinaria, antes he de ser más firme y constante que aquellas que parecen altaneras debido a que son astutas. Te confesaré que más fingimiento hubiera guardado contigo, si no me hubieras escuchado aquellas palabras que, sin pensarlo yo, demostraron toda la pasión de mi corazón. Perdóname, y no juzgues como ligereza este rendirme tan pronto. La soledad de la noche lo ha provocado.

Romeo: Te juro, amada mía, por los rayos de la luna que bañan la copa de estos árboles...

Julieta: No jures por la luna, que en su veloz desplazamiento cambia de apariencia cada mes. No vayas a copiar su inconstancia.

Romeo: ¿Entonces, por quién juraré?

Julieta: No expreses ningún juramento. Si acaso, jura por ti mismo, por tu persona que es el dios que adoro y en quien he de creer.

Romeo: ¡Ojalá que la hoguera de mi amor...!

Julieta: No jures. Aunque estoy muy alegre de verte, esta noche no quiero escuchar esos juramentos que parecen violentos y muy rápidos. Se parecen al rayo que se apaga, apenas surge. Márchate ahora; tal vez cuando regreses haya llegado a abrirse, excitado por las brisas del verano, el capullo de esta flor. Adiós, ¡y ojalá excite tu pecho en tan dulce calma como el mío!

Romeo: ¿Y solamente me das ese consuelo?

Julieta: ¿Y qué otro puedo ofrecerte esta noche?

Romeo: Tu fe por la mía.

Julieta: Te la di antes de que tú me la pidieras. Lo que lamento es no poder dártela de nuevo.

Romeo: ¿Pues qué? ¿De nuevo deseas quitármela?

Julieta: Sí, para ofrecértela de nuevo, pese a que esto fuera avaricia de un bien que ya poseo. No obstante mi anhelo de ofrecértelo todo es tan profundo y no tiene límites como los abismos del mar. ¡Cuanto más te doy, más quisiera darte! ... Sin embargo escucho ruidos dentro. ¡Hasta luego! No engañes mi esperanza... Ama, allá voy... Sé leal conmigo, Montesco mío. Aguarda unos minutos, regreso inmediatamente.

Romeo: ¡Noche, deliciosa noche! Sola fuente tengo miedo de que, por ser de noche, todo esto sólo sea un hermoso sueño.

Julieta Asomada otra vez a la ventana): Únicamente te diré dos cosas. Si el propósito de tu amor es desinteresado, si quieres casarte, díselo mañana al mandadero que te enviaré; dile en qué fecha y cómo quieres realizar la sagrada ceremonia. Yo te sacrificaré mi vida e iré tras de ti por todo el mundo.

Ama (Llamando desde dentro): ¡Julieta!

Julieta: Enseguida voy. Sin embargo si son perversos tus propósitos, te ruego que...

Ama: ¡Julieta!

Julieta: Ya voy... Te ruego que renuncies a tu propósito, y me dejes a solas con mi pena. Mañana irá el mandadero...

Romeo: Por la gloria...

Julieta: Que tengas buenas noches.

Romeo: No lo creo, pues ¿cómo han de ser buenas si no tengo tus rayos? El amor busca al amor como el estudiante huye de sus libros, y el amor abandona al amor como el niño que deja sus juegos para regresar al estudio.

Julieta (Otra vez frente a la ventana): ¡Romeo! ¡Romeo! ¡Oh, si yo tuviera la voz del cazador de cetrería, para llamar de lejos a los halcones! Si yo pudiera hablar a gritos, se filtraría mi voz hasta en la gruta de la ninfa Eco, y la ensordecería repitiendo el nombre de mi Romeo.

Romeo: ¡Qué cautivante se escucha el tono de mi amada en la plácida noche, defensora de los amantes! Más dulce es que música en oído alerta.

Julieta: ¡Romeo!

Romeo: ¡Alma mía!

Julieta: ¿A qué hora quieres que vaya mi criado mañana?

Romeo: A las nueve.

Julieta: Ten la certeza de que irá. Las horas se me harán siglos hasta que ésa llegue. No sé para qué te he llamado.

Romeo: ¡Permíteme que me quede en este lugar hasta que lo pienses!

Julieta: Con la felicidad que me provoca verte cerca se me olvidará perpetuamente en lo que pensaba, recordando tu agradable compañía.

Romeo: Para que continúe tu olvido no he de marcharme.

Julieta: Ya amaneció; márchate... No obstante no quisiera que te apartaras más que el escaso tramo que consiente apartarse al pajarillo la niña que lo tiene sujeto de una cuerda de seda, y que en algunas ocasiones le suelta de la mano, y después lo apresa ansiosa, y lo suelta de nuevo.

Romeo: ¡Quisiera ser yo ese pajarillo!

Julieta: ¡Y yo también lo desearía! Pero sospecho que mis caricias te matarían. ¡Hasta luego, hasta luego! Triste es la ausencia y muy dulce la despedida, que no sé cómo desprenderme de los hierros de esta ventana.

Romeo: ¡Que el sueño inunde tus bellos ojos y la paz colme tu alma! ¡Ojalá fuera yo el sueño, ojalá fuera yo la paz donde se duerme tu hermosura! De aquí me dirigiré adonde mora mi bondadoso confesor, para pedirle que me aconseje en este trance.”

Acto II- Escena II -Jardín de la casa de Capuleto-Romeo y Julieta-Shakespeare


MIRA + Un poco de humor

El Chapulín Colorado - La Romántica Historia de Juleo y Rumieta - Completo        https://www.youtube.com/watch?v=t8cbz5YAdpI

lunes, 5 de septiembre de 2016

Flaco loco vs. molinos




LAS DOS PLUMAS MÁS GRANDES  SE FUERON JUNTAS HACE 400 AÑOS
Shakespeare y Cervantes, creadores de cabecera de la literatura universal, el británico y el español, murieron el mismo año. Con motivo a tan importante aniversario, Proyecto LEE (LECTURA EN ESPERA) invita a realizar un recorrido virtual por dos obras cumbres de dichos autores:
·         “El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha”, de Miguel de Cervantes, es la obra más destacada de la literatura española y una de las principales de la literatura universal. El libro más traducido y editado luego de la Biblia.
·         “Romeo y Julieta”, de William Shakespeare, se ha convertido en la historia de amor por antonomasia, y puede afirmarse que su fama excede a la del mismo autor.


Los gigantes de la Mancha
El capítulo VIII de la primera parte de “El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha”, tiene este título: “Del buen suceso que el valeroso don Quijote tuvo en la espantable y jamás imaginada aventura de los molinos de viento, con otros sucesos dignos de felices recordación”.

Y así comienza este capítulo, con don Quijote iniciando la ansiada segunda salida de su pueblo, Alcázar de San Juan,  esta vez ya acompañado por Sancho Panza, habiendo salido en mitad de la noche para no ser vistos por sus familias y vecinos que seguro habrían intentado impedir su marcha. Con los primeros rayos del sol de aquella mañana, comienza la aventura.

 Flaco loco vs. molinos:
"En esto, descubrieron treinta o cuarenta molinos de viento que hay en aquel campo; y, así como don Quijote los vio, dijo a su escudero:
–La ventura va guiando nuestras cosas mejor de lo que acertáramos a desear, porque ves allí, amigo Sancho Panza, donde se descubren treinta, o pocos más, desaforados gigantes, con quien pienso hacer batalla y quitarles a todos las vidas, con cuyos despojos comenzaremos a enriquecer; que ésta es buena guerra, y es gran servicio de Dios quitar tan mala simiente de sobre la faz de la tierra. – ¿Qué gigantes? –dijo Sancho Panza.
–Aquellos que allí ves –respondió su amo– de los brazos largos, que los suelen tener algunos de casi dos leguas.
–Mire vuestra merced –respondió Sancho– que aquellos que allí se parecen no son gigantes, sino molinos de viento, y lo que en ellos parecen brazos son las aspas, que, volteadas del viento, hacen andar la piedra del molino.
–Bien parece –respondió don Quijote– que no estás cursado en esto de las aventuras: ellos son gigantes; y si tienes miedo, quítate de ahí, y ponte en oración en el espacio que yo voy a entrar con ellos en fiera y desigual batalla.
Y, diciendo esto, dio de espuelas a su caballo Rocinante, sin atender a las voces que su escudero Sancho le daba, advirtiéndole que, sin duda alguna, eran molinos de viento, y no gigantes, aquellos que iba a acometer. Pero él iba tan puesto en que eran gigantes, que ni oía las voces de su escudero Sancho ni echaba de ver, aunque estaba ya bien cerca, lo que eran; antes, iba diciendo en voces altas:
–Non fuyades, cobardes y viles criaturas, que un solo caballero es el que os acomete."

Parte I, Capítulo VIII- Miguel de Cervantes 

LEE+ El ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha 1º PARTE
Luchar contra molinos de viento


Luchar contra molinos de viento es una expresión de origen literario que significa "pelear contra enemigos imaginarios". Está tomada del capítulo VIII de la Primera Parte de El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha, de Miguel de Cervantes Saavedra, titulado "Los molinos de viento".




ESCUCHA +
El sueño imposible-El hombre de la mancha, MUSICAL CON JOSÉ SACRISTÁN Y PALOMA SAN BASILIO.



Vivir loco y morir cuerdo




LAS DOS PLUMAS MÁS GRANDES  SE FUERON JUNTAS HACE 400 AÑOS
Shakespeare y Cervantes, creadores de cabecera de la literatura universal, el británico y el español, murieron el mismo año. Con motivo a tan importante aniversario, Proyecto LEE (LECTURA EN ESPERA) invita a realizar un recorrido virtual por dos obras cumbres de dichos autores:
  • “El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha”, de Miguel de Cervantes, es la obra más destacada de la literatura española y una de las principales de la literatura universal. El libro más traducido y editado luego de la Biblia.
  • “Romeo y Julieta”, de William Shakespeare, se ha convertido en la historia de amor por antonomasia, y puede afirmarse que su fama excede a la del mismo autor.
VIVIR LOCO Y MORIR CUERDO
La obra es curiosa… nos muestra que Don Quijote estaba loco; porque en su época, querer honrar un nombre y querer honrar el país o la patria era un asunto de locos; querer que un hombre tenga peso y valor era un asunto de locos. La primera gran “locura” es atreverse a Ser diferente, atreverse a vivir unos sueños que de tanto pensarlos, “le secó el cerebro”. Alonso  “se vuelve loco” y nace el Quijote.
La novela  arranca con un personaje de 50 años, que decide tomar un nombre, limpiar sus armas, darle un nombre a su caballo, y además dedicarle sus obras a una Dama. Casi no la conoce, pero resuelve que  se quiere enamorar de la Idea de una Dama; no de una mujer, sino de una Idea de una Dama, la llama Dulcinea del Toboso.
Luego convence de su “locura” a Sancho Panza; un vecino a quien le promete una ínsula o todo aquello que el destino y Dios le quiera dar. De tanto convencerlo y someterlo, Sancho decide seguirlo, primero por ánimos de lucro y luego por otros motivos. Lo cierto es que los dos juntos van a encarnar simbólicamente al ser humano: Quijote es ese conjunto de sueños que todos tarde o temprano tenemos –algunos los dejan ir y otros no–; y Sancho representa la carne, los sentimientos y los pensamientos comunes y corrientes, la realidad. El Ser Humano está compuesto “de lo uno y de lo otro”, de aquello que muere y de aquello que no muere. Hemos de creer que nos moriremos y que algo de nosotros no morirá. Si logramos entenderlo, éste es el juego de El Quijote y Sancho; aquello que es duradero y aquello que es perecedero.
El Quijote ha tenido que enfrentar, durante toda la historia, una adversidad permanente. El querer vivir sus sueños, que le han dado gran alegría y orgullo interior, no significa que ha llevado de la mano un éxito material, un reconocimiento social o incluso la superación de los males y los entuertos que decidió arremeter. El Caballero de la Triste Figura es el nombre con el que empieza a conocerlo todo el mundo. Es el “loco de la Triste Figura” porque muchas veces el querer vivir un sueño y un Ideal implica que a uno le tilden de “loco” o de “triste”.
Finalmente, la aventura del león prepara su camino de vuelta y lo habilita a morir. Lo que queda es muy poco para retornar a su casa, donde  vuelve a ser Alonso Quijano y acepta que todas sus locuras eran locuras.
De cómo don Quijote cayó malo y del testamento que hizo y su muerte
“Como las cosas humanas no sean eternas, yendo siempre en declinación de sus principios hasta llegar a su último fin, especialmente las vidas de los hombres, y como la de don Quijote no tuviese privilegio del cielo para detener el curso de la suya, llegó su fin y acabamiento cuando él menos lo pensaba; porque o ya fuese de la melancolía que le causaba el verse vencido o ya por la disposición del cielo, que así lo ordenaba, se le arraigó una calentura que le tuvo seis días en la cama, en los cuales fue visitado muchas veces del cura, del bachiller y del barbero, sus amigos, sin quitársele de la cabecera Sancho Panza, su buen escudero.[…….]
—Dadme albricias, buenos señores, de que ya yo no soy don Quijote de la Mancha, sino Alonso Quijano, a quien mis costumbres me dieron renombre de «bueno». Ya no soy enemigo de Amadís de Gaula y de toda la infinita caterva de su linaje; ya me son odiosas todas las historias profanas de la andante caballería; ya conozco mi necedad y el peligro en que me pusieron haberlas leído; ya, por misericordia de Dios escarmentando en cabeza propia, las abomino.[…]
 En fin, llegó el último de don Quijote, después de recebidos todos los sacramentos, y después de haber abominado con muchas y eficaces razones de los libros de caballerías. Hallóse el escribano presente, y dijo que nunca había leído en ningún libro de caballerías que algún caballero andante hubiese muerto en su lecho tan sosegadamente y tan cristiano como don Quijote; el cual, entre compasiones y lágrimas de los que allí se hallaron, dio su espíritu: quiero decir que se murió.
Viendo lo cual el cura, pidió al escribano le diese por testimonio como Alonso Quijano el Bueno, llamado comúnmente don Quijote de la Mancha, había pasado desta presente vida y muerto naturalmente; y que el tal testimonio pedía para quitar la ocasión de algún otro autor que Cide Hamete Benengeli le resucitase falsamente, y hiciese inacabables historias de sus hazañas.
 Este fin tuvo el Ingenioso Hidalgo de la Mancha, cuyo lugar no quiso poner Cide Hamete puntualmente, por dejar que todas las villas y lugares de la Mancha contendiesen entre sí por ahijársele y tenérsele por suyo, como contendieron las siete ciudades de Grecia por Homero.
 Déjanse de poner aquí los llantos de Sancho, sobrina y ama de don Quijote, los nuevos epitafios de su sepultura, aunque Sansón Carrasco le puso éste:


Yace aquí el Hidalgo fuerte
que a tanto extremo llegó
de valiente, que se advierte
que la muerte no triunfó
de su vida con su muerte.
Tuvo a todo el mundo en poco;
fue el espantajo y el coco
del mundo, en tal coyuntura,
que acreditó su ventura
morir cuerdo y vivir loco.



 Y el prudentísimo Cide Hamete dijo a su pluma:
 -Aquí quedarás, colgada desta espetera y deste hilo de alambre, ni sé si bien cortada o mal tajada péñola mía, adonde vivirás luengos siglos, si presuntuosos y malandrines historiadores no te descuelgan para profanarte. Pero, antes que a ti lleguen, les puedes advertir, y decirles en el mejor modo que pudieres:
 ''¡Tate, tate, folloncicos!                                        
 De ninguno sea tocada;
 porque está impresa, buen rey,
 para mí estaba guardada.
 Para mí sola nació don Quijote, y yo para él; él supo obrar y yo escribir; solos los dos somos para en uno, a despecho y pesar del escritor fingido y tordesillesco que se atrevió, o se ha de atrever, a escribir con pluma de avestruz grosera y mal deliñada las hazañas de mi valeroso caballero, porque no es carga de sus hombros ni asunto de su resfriado ingenio; a quien advertirás, si acaso llegas a conocerle, que deje reposar en la sepultura los cansados y ya podridos huesos de don Quijote, y no le quiera llevar, contra todos los fueros de la muerte, a Castilla la Vieja, haciéndole salir de la fuesa donde real y verdaderamente yace tendido de largo a largo, imposibilitado de hacer tercera jornada y salida nueva; que, para hacer burla de tantas como hicieron tantos andantes caballeros, bastan las dos que él hizo, tan a gusto y beneplácito de las gentes a cuya noticia llegaron, así en éstos como en los extraños reinos''. Y con esto cumplirás con tu cristiana profesión, aconsejando bien a quien mal te quiere, y yo quedaré satisfecho y ufano de haber sido el primero que gozó el fruto de sus escritos enteramente, como deseaba, pues no ha sido otro mi deseo que poner en aborrecimiento de los hombres las fingidas y disparatadas historias de los libros de caballerías, que, por las de mi verdadero don Quijote, van ya tropezando, y han de caer del todo, sin duda alguna. Vale.”

Parte II, Capítulo LXXIV- Miguel de Cervantes

LEE +El ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha 1º Parte
El íngenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha 2º Parte

CONOCE +


Curiosidades sobre Miguel de Cervantes

>> Cervantes y su hermano vivieron en esclavitud desde 1575 hasta 1580 y solo fueron liberados tras el pago de un rescate (500 escudos).

>> Pese a que hay varios retratos y dibujos sobre su rostro no hay registros que confirmen el verdadero aspecto del escritor.

>> Fue apodado como “El manco de Lepanto” (1571) luego de recibir un disparo en la mano izquierda durante la batalla de Lepanto, pero nunca se la amputaron.

>> Miguel de Cervantes y William Shakespeare no coinciden en la fecha de muerte. El autor del Quijote falleció el 22 de abril de 1616 y fue sepultado un día después según el calendario gregoriano. Por su parte, el escritor de Romeo y Julieta, tomando en cuenta ese mismo calendario, murió el 3 de mayo.

>> Era tartamudo. En el prólogo de sus Novelas ejemplares lo explicó. "Será forzoso valerme por mi pico,que, aunque tartamudo, no lo seré para decir verdades".






Nunca hubo historia de mayor desconsuelo



LAS DOS PLUMAS MÁS GRANDES  SE FUERON JUNTAS HACE 400 AÑOS
Shakespeare y Cervantes, creadores de cabecera de la literatura universal, el británico y el español, murieron el mismo año. Con motivo a tan importante aniversario, Proyecto LEE (LECTURA EN ESPERA) invita a realizar un recorrido virtual por dos obras cumbres de dichos autores:
·         “El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha”, de Miguel de Cervantes, es la obra más destacada de la literatura española y una de las principales de la literatura universal. El libro más traducido y editado luego de la Biblia.
·         “Romeo y Julieta”, de William Shakespeare, se ha convertido en la historia de amor por antonomasia, y puede afirmarse que su fama excede a la del mismo autor.

Nunca hubo historia de más desconsuelo

Eterno símbolo del amor que brota incontenible contra toda fuerza opuesta, Romeo y Julieta dramatiza una leyenda popularizada en el Renacimiento por incontables relatos italianos, franceses e ingleses, en prosa y verso, pero que apenas sería hoy recordada si no hubiera inspirado esta primera gran pieza teatral de Shakespeare, donde resabios de la lucha feudal y destellos cómicos de sirvientes y camaradas se entremezclan magistralmente con el más bello canto al amor.

Romeo y Julieta es la historia de un amor que nace imposible y, signado por una serie de malentendidos, acaba con la muerte de los amantes. También es el arquetipo de la tragedia amorosa. Porque los dos adolescentes de Verona, que reavivan el odio entre las familias Montesco y Capuleto y subvierten el orden de la ciudad de Mantua, corporizan la pasión por excelencia; aquélla que desatiende consejos y órdenes públicos y quiere moldear el mundo a la medida de sus deseos.


       “Ante la tumba de Julieta, Romeo, que la cree muerta, toma un veneno y muere. Julieta, que seguía con vida, despierta…  (Julieta se levanta.)
Julieta.—¡Oh, padre de mi consuelo! ¿Dónde está mi señor? Recuerdo bien dónde debía estar yo y aquí estoy; pero, ¿dónde está mi Romeo?

Fray Lorenzo.—Se oye ruido, señora, salid de este lugar de muerte. Una fuerza sobrenatural que no hemos podido dominar ha torcido nuestros planes. Salid de ahí. Vuestro esposo está muerto junto a vos y también Paris. Venid. Haré todo lo necesario para que ingreséis en un convento. No hagáis preguntas, pues llega la guardia. No puedo quedarme más tiempo.

Julieta.—Id vos. Yo me quedo. (Sale el fraile.) ¿Qué es esto? ¿Una copa sujeta en la mano de mi amado? El veneno, ya veo, ha sido la causa de su muerte. ¡Qué cruel! Te lo bebiste todo sin dejar ni una gota para mí. Te besaré; quizás quede algo de veneno en tus labios (Lo besa.) Tus labios están aún calientes… (Se acerca el criado de Paris con la guardia.) Alguien viene. Tengo que ser rápida… ¡Oh, feliz puñal, esta es tu casa, ven a ella y dame muerte!
Se clava el puñal y cae.

Entran algunos guardias […] Entran el Príncipe […], Capuleto, su esposa y sirvientes.
Capuleto.—¿Qué es esto que tanto gritan ahí fuera?

Sra. Capuleto.—La gente en la calle grita «Romeo»; otros «Julieta» y otros «Paris». Y todos corren hacia nuestro panteón.

Príncipe.—Buscad y averiguad cómo se ha producido este crimen.
Guardia primero.— Soberano, aquí yace muerto el conde Paris, y Romeo, y Julieta, antes muerta y ahora de nuevo asesinada, todavía caliente. […]
Capuleto.—¡Oh, cielos! Mira, esposa, cómo sangra nuestra hija. Tiene un puñal clavado en el pecho.
Sra. Capuleto.—¡Ay de mí! Este espectáculo de muerte es como una campana que llama a mi vejez a la tumba.
Entra Montesco y sus criados.
Príncipe.—Ven, Montesco. Temprano te has levantado para ver caído a tu hijo y heredero.
Montesco.—Mi señor, mi esposa ha muerto esta noche porque no ha podido soportar el exilio de nuestro hijo. ¿Qué otra desventura amenaza mi vejez?

Príncipe.—Míralo por ti mismo.

Montesco.—¡Oh, hijo cruel! ¿Cómo has podido irte a la tumba antes que tu padre?
 En este momento, Fray Lorenzo y el criado de Romeo cuentan lo que ha sucedido entre los
enamorados, cuya raíz es el odio profundo entre ambas familias. Capuleto y Montesco dejan a un lado sus rencillas, ante la dolorosa escena de sus hijos muertos, y la tragedia termina con estas palabras del Príncipe:
Príncipe.—Una dolorosa paz trae la mañana. El sol apenado no asoma su cabeza. ¡Vayamos! Hemos de seguir hablando de estos hechos: algunos serán perdonados y otros castigados, pues nunca hubo una historia de más de consuelo…”

ESCENA III- Cementerio, con el panteón de los Capuletos- Romeo y Julieta-Shakespeare





MIRA+ La última escena
Romeo y Julieta 1968 –El final.


Enamorados se suicidan por falta de comunicación



Romeo y Julieta
LAS DOS PLUMAS MÁS GRANDES  SE FUERON JUNTAS HACE 400 AÑOS
Shakespeare y Cervantes, creadores de cabecera de la literatura universal, el británico y el español, murieron el mismo año. Con motivo a tan importante aniversario, Proyecto LEE (LECTURA EN ESPERA) invita a realizar un recorrido virtual por dos obras cumbres de dichos autores:
·         “El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha”, de Miguel de Cervantes, es la obra más destacada de la literatura española y una de las principales de la literatura universal. El libro más traducido y editado luego de la Biblia.
·         “Romeo y Julieta”, de William Shakespeare, se ha convertido en la historia de amor por antonomasia, y puede afirmarse que su fama excede a la del mismo autor.

Enamorados se suicidan por falta de comunicación
"Esta es la historia, la historia de amor que no fue y no será, yo soy el Romeo sin Julieta. Yo soy el Romeo, el amante Romeo, Romeo el que vive y muere de amor, el que sufre y el que llora, Romeo, el que espera, el que busca, yo soy omeo, el que muere y mata de amor"
Ricardo Ramos Soltero

La historia se desarrolla en Verona, donde viven dos familias rivales: los Montesco y los Capuleto. Romeo, único heredero de los Montesco, entra al baile de máscaras de los Capuleto, en el que conoce a Julieta, hija única de la familia; ambos se enamoran a primera vista. Sabiendo que sus padres jamás permitirán su unión, se casan en secreto, con ayuda de Fray Lorenzo. Teobaldo, uno de los Capuleto, insulta a Romeo pero el joven se niega a batirse.  Pero Mercutio, el mejor amigo de Romeo sí se bate con Teobaldo. Romeo trata de separarlos, pero Mercurio es herido de muerte y Romeo reta a su rival y venga a su amigo matando al Capuleto.
El Príncipe de Verona, indignado, condena a Romeo al destierro o a la muerte. Romeo se desespera porque estará separado de Julieta, pero Fray Lorenzo le aconseja que escape a Mantua, hasta que pueda ser publicado su matrimonio con Julieta y se reúna con ella.
Romeo escapa después de una última entrevista con Julieta. Durante su ausencia, el Conde Paris, pariente del príncipe, pide la mano de Julieta y le es concedida. Julieta se niega y pide auxilio a Fray Lorenzo, quien le aconseja que acepte la boda y le entrega un frasco con un elixir que la sumirá en estado cataléptico, parecido a la muerte. Ella debe tomarlo la noche anterior a la boda y le dice que él estará allí, en la cripta, acompañado de Romeo, cuando despierte.
Fray Lorenzo envía un mensajero a Romeo pero no lo encuentran porque él, al enterarse de la muerte de su amada, sale hacia Verona. Romeo llega a la cripta encontrándose con Paris, que iba a depositar flores a su futura esposa. El Conde se indigna al ver a Romeo y ambos se baten, resultado vencedor el joven. Romeo se acerca a Julieta, la besa por última vez y toma veneno, falleciendo a los pies de su amada. En ese momento llega Fray Lorenzo, quien se aterroriza al ver los cuerpos de Paris y Romeo. Julieta despierta y el fraile trata de convencerla para que huya con él, pero la joven se niega al ver a su esposo muerto. Fray Lorenzo se va y Julieta se acerca a Romeo, lo besa y se clava el puñal de su esposo, muriendo abrazando a su amado. Los guardias aprenden a Fray Lorenzo y él revela la verdad ante el Príncipe de Verona, los Montesco y los Capuleto.
Con la muerte de Romeo y Julieta, se sella la paz entre las dos familias rivales.

CONOCE +


Frases de Romeo y Julieta

para creer en el amor hasta la muerte.


“Se ríe de las cicatrices quien nunca ha sentido una herida.”
“El paraíso está aquí donde vive Julieta.”
“Ha jurado no amar nunca y este juramento da la muerte, manteniendo la vida, al mortal que te habla ahora.”
“Llámame tan sólo tu amante y recibiré un segundo bautismo: de aquí en adelante no seré más Romeo.”
“No jures por la luna, por la inconstante luna, cuyo disco cambia cada mes, no sea que tu amor se vuelva tan variable.”
“¿Mi amor? Te lo di antes de que lo hubieses pedido. Y sin embargo quisiera que se pudiese dar otra vez.”
“Mi liberalidad es tan ilimitada como el mar; mi amor, inagotable como él; mientras más te doy, más me, queda; la una y el otro son infinitos.”
“Como es de noche, tengo miedo que todo esto no sea sino un sueño, dulce, halagador a lo sumo para ser real.”
“Qué tiene un nombre? Lo que llamamos rosa olería tan fragante con cualquier otro nombre.”
“Que venga el pesar que quiera; nunca igualará a la suma de felicidad que brinda el contemplarla un breve instante.”
“Hay para mí más peligro en tus ojos que en afrontar veinte espadas desnudas. Concédeme tan sólo una dulce mirada, y eso me basta para desafiar el furor de todos.”
“¿Sabía yo lo qué es amor? Ojos jurad que no. Porque nunca había visto una belleza así.”
“Enséñame a olvidarme de pensar.”
“Más que infeliz mil veces por faltarme tu luz. Como el escolar, lejos de sus libros, corre el amor hacia el amor; pero el amor del amor se aleja, como el niño que vuele a la escuela.”



MIRA+
Romeo and Juliet: película completa 
Romeo and Juliet, Reino Unido, Italia, Suiza, 2013.Dirección: Carlo Carlei. / Con: Hailee Steinfeld, Douglas Booth, Ed Westwick, Holly Hunter, Kodi Smit-McPhee, Paul Giamatti. /Guión: Julian Fellowes, basado en la obra de William Shakespeare. /

lunes, 1 de agosto de 2016

SUMAMOS ESFUERZOS EN EL DÍA DE LA SOLIDARIDAD, EL 26 DE AGOSTO MARATÓN DE TAPITAS

El 26 de agosto se celebra el "Día de la Solidaridad". Por tal motivo, el IPEM Nº 276 "Dr. Ricardo L. Coloccini" realiza la maratón de tapitas plásticas, promoviendo la solidaridad, la responsabilidad social y la participación ciudadana y adhiriendo al Programa de Reciclado y Medio Ambiente, de la Fundación Garrahan, que propone de esta manera, contribuir con la preservación del planeta, promoviendo hábitos adecuados para su defensa permanente. 
Con la recaudación de tapitas plásticas, la Fundación Garrahan, junto a Easy,  presenta nuevamente el “EcoKit”, un set de productos sustentables realizado íntegramente con el reciclado de 660 tapitas de plástico donadas por la comunidad al Programa de Reciclado y Medio Ambiente de Fundación Garrahan.
El EcoKit está compuesto por un balde, una palita para la basura y una palangana. Cada uno de los productos están señalizados con el logo de nuestra institución. Pueden adquirirse en los Easy de todo el país a $79 y con su compra se colabora con Fundación Garrahan. En esta oportunidad, lo recaudado se destinará a la construcción del nuevo Centro Vacunatorio del Hospital de Pediatría Garrahan.